Manuel López – septiembre 27, 2021
Familiares de Guadalupe Martínez, hallada muerta dentro de una unidad de transporte público en municipio de Los Reyes La Paz, exigieron justicia y castigo ejemplar al presunto responsable.
«Pato», como era conocida entre sus compañeros, manejaba una combi de la Ruta 83, misma en la que el jueves pasado la encontraron sin vida.
El día de los hechos su cuerpo estaba recostado dentro del asiento del conductor con huellas de asfixia y dos impactos de arma de fuego en el cuerpo.
De acuerdo con familiares, previo a su muerte Guadalupe reconoció que era víctima de violencia por parte de su pareja sentimental, identificada como Miguel N, ex policía federal.
«Ella tenía moretones y primero nos decía que se había golpeado o que se había caído, pero lo más fuerte fue apenas cuando la golpeó muy feo este tipo y tuvimos que ir auxiliarla», narra uno de sus familiares.
Desde entonces «Pato» vivía con temor, pero sus deseos de sacar adelante a sus cuatro hijos fueron más fuertes y por los cuales se paraba a diario a las cinco de la mañana para salir a trabajar en su combi.
«Ella era muy trabajadora tenía dos combis y quería sacar otras para dejarle a cada uno de sus hijos una y que no dependieran de un jefe o un empleo, pero desafortunadamente nos la arrebataron de una manera muy cobarde», dijeron.
Aunque en un principio las autoridades reportaron el caso como un aparente robo, las pruebas que han sido recolectadas indican ahora como presunto responsable a Miguel, quien se ostentaba como policía federal.
«Nosotros lo que queremos es justicia, que se castigue conforme a derecho y que el caso que sea clasificado como feminicidio porque ella ya vivía violencia anteriormente y que no se tome como un robo», dijeron.
Indicaron que actualmente Miguel N se encuentra bajo prisión preventiva en un reclusorio del municipio de Nezahualcóyotl en espera de la integración de la carpeta por parte del Ministerio Público.
Este domingo los restos de «Pato» fueron llevados a un panteón del municipio de Los Reyes La Paz, entre música de banda y en compañía de varios compañeros de transporte público y gritos de justicia.