Una mujer argentina provocó hoy un debate nacional luego de que eligiera el Día del Amor para casarse con el asesino de su hermana gemela.
Edith Casas, de 22 años, contrajo matrimonio este jueves con Víctor Cingolani, quien cumple una pena de prisión acusado del asesinato de Johana en 2010.
La ceremonia se realizó con custodia policial, ya que la pareja fue atacada cuando acudió a firmar el acta matrimonial en un registro civil de la localidad de Pico Truncado, de la patagónica provincia de Santa Cruz.
Cuando Casas y Cingolani salieron del registro, decenas de vecinos le lanzaron piedras al hombre, quien obtuvo un permiso judicial que le permitió abandonar por un rato la prisión para casarse.
Cingolani, de 28 años fue novio de Johana Casas, quien en 2010 lo abandonó para vivir con una nueva pareja, Marcos Díaz.
El 16 de julio de ese año, Johana fue asesinada con dos balazos en el pecho, y la justicia concluyó que los responsables fueron Cingolani y Díaz.
Una vez en la cárcel, la hermana gemela de Johana, Edith, comenzó a visitarlo y se enamoraron, convencida de que nada tuvo que ver en la muerte de Johana.
Su decisión causó un escándalo el año pasado, ya que la madre de las gemelas interpuso incluso un amparo judicial para evitar la boda, pero finalmente la justicia no encontró argumentos para impedirles ese derecho.
De manera irónica, la boda se llevó a cabo finalmente en el Día de San Valentín, y la nueva pareja no escatimó declaraciones de amor ante la prensa.
«Voy a casarme con el hombre que amo y no con quien asesinó a mi hermana, vamos a formar una familia y a tener hijos», afirmó la nueva esposa con una amplia sonrisa.
Su pareja, en tanto, deseó que algún «se sepa la verdad» para que «la gente deje de llamarme asesino, porque no lo soy».
